Un ritual de limpieza es una ceremonia en la que se queman resinas y hierbas para eliminar las energías no deseadas que pueden haberse adherido a un espacio o individuo, disminuyendo así la ansiedad, la tristeza y los pensamientos oscuros. Durante siglos, las culturas nativas americanas e indígenas han utilizado la quema de plantas sagradas como la salvia, el cedro, la hierba dulce y el palo santo para limpiar el entorno y a las personas.
Durante la ceremonia, se formulan intenciones y oraciones para conectarse con la madre tierra, el padre cielo, el sol, la luna, las plantas, los animales y el agua. El humo que se genera actúa como un baño de limpieza espiritual que rodea al individuo o al espacio, eliminando los sentimientos y energías negativos.
Es importante establecer una intención clara durante la ceremonia de sahumerio para que las oraciones y las intenciones sean escuchadas. A través de esta conexión con el espíritu, se crea una apertura para llevar a cabo una intención positiva y fomentar la armonía y la paz en las personas y en el entorno.
Las plantas más comúnmente utilizadas para rituales son la salvia, el cedro, la hierba dulce, el tabaco y el Palo Santo. La salvia se utiliza para obtener claridad, visión, fuerza y sabiduría, y se considera una medicina para las mujeres. El cedro se utiliza para aumentar la energía positiva, equilibrar y purificar el ambiente. La hierba dulce simboliza la bondad y se quema como ritual de limpieza, mientras que el tabaco se utiliza como una planta sagrada para sellar promesas y agradecer a la Madre Tierra. Por último, el Palo Santo es un árbol místico conocido por elevar la vibración en la preparación para la meditación, los esfuerzos creativos y la ceremonia, y se utiliza de la misma manera que la salvia para limpiar el aire y pedir permiso a los espíritus para realizar la ceremonia.
¿Cómo hacer una limpieza? Aprende sobre el sahumado
El sahumado es una técnica que se puede utilizar para purificar el aire y el ambiente antes de una ceremonia, meditación, yoga, o incluso en la naturaleza. Para realizar esta práctica, necesitarás un cuenco de arcilla o una concha grande de almeja o abulón, hierbas de tu elección para quemar, fósforos de madera y una pluma o tu mano para agitar el humo.
Antes de comenzar, busca un espacio tranquilo donde puedas sentarte durante unos minutos para sentir la tierra debajo de ti y aclarar tus intenciones. Abre las ventanas si estás en un espacio cerrado. Luego, coloca las hierbas o la resina de la planta en el recipiente y enciéndelas con una cerilla de madera durante 20 segundos o hasta que cojan fuego. Agita las hierbas con la pluma o la mano para que la llama se apague y el humo se arremoline.
Dirige el humo con la pluma o la mano sobre tu cara con los ojos cerrados, sobre el corazón y las extremidades, la coronilla y bajo los pies. Si estás sahumando a otros, comienza por la parte delantera del cuerpo y luego pídeles que se giren para sahumar la parte trasera del cuerpo y los pies.
Mientras realizas el sahumado, ten una clara intención de purificar con tu luz y amor a quien estás sahumando. Si estás sahumando un espacio, asegúrate de cubrir cada rincón con el humo. Una vez que hayas terminado, recoge las cenizas de las hierbas quemadas y devuélvelas a la tierra.
El sahumado es una práctica maravillosa para limpiar la energía negativa de una casa o estudio, o para comenzar cualquier tipo de ceremonia o meditación. Siguiendo estos sencillos pasos, podrás hacer una limpieza efectiva y energética para comenzar tus prácticas con la mejor energía posible.